Hace justo una semana finalizaba el 40 aniversario de una de las pruebas más duras y con más historia del automovilismo nacional, el Rallye Sierra Morena. En ella participaron cuatro equipos de nuestra escudería y una veintena de personas en las labores organizativas. Juan Jesús Coca y Luisa Benítez fueron los que más arriba terminaron, cuajando una meritoria vigésimo quinta posición en el Supercampeonato de España de Rallyes (SCER) entre los más de 80 inscritos en Velocidad. Tras una mañana algo descafeinada por las neutralizaciones de varias especiales, la dupla de Escudería Sierra Morena afrontaba la jornada vespertina del sábado con una estrategia “conservadora”, buscando preservar la mecánica de su Audi A1 N3. “Este tipo de rallyes se caracteriza por su dureza, por eso siempre buscamos mantenernos lo más arriba posible sin asumir muchos riesgos y sin acumular problemas”, comentaba el piloto de Villanueva de Córdoba al finalizar la carrera. El domingo intentaron mantener la misma tónica que el día anterior y, al final, “se cumplió nuestro deseo de terminar otro Sierra Morena, en nuestro caso el trigésimo, y además pudimos subir al podio de la Categoría N3 y la Copa Diputación, donde terminamos segundos y terceros respectivamente”, explicaba. Ahora, los vigentes subcampeones de la Copa FAA tienen la mira puesta en el trofeo regional donde intentarán luchar por la victoria hasta el final.
José Carlos Martín fue otro de los pilotos de Escudería Sierra Morena que se sumó a la prueba de apertura del Supercampeonato de España de Rallyes 2023. Tras el buen resultado cosechado en la Cronometrada de las Minas llegada a la prueba capitalina con ganas de seguir progresando a lomos de su Peugeot 206, aunque esta vez le tocó vivir la cara amarga de las carreras. El jueves, dos días antes del inicio del rallye, tuvo que cambiar de copiloto in extremis. José Manuel Rubio, que se había subido a su derecha tan sólo una vez, fue quien ocupó de nuevo el baquet de las notas. “Gracias a él pudimos salir a correr, aunque sin reconocer los tramos prácticamente”, aseguraba Martín. A ellos también les tocó sufrir las dos neutralizaciones que se produjeron el sábado por la mañana y sólo pudieron correr en Cerrobejuelas. “Lo disfrutamos mucho, aunque salimos a tantear el tramo y ver cómo se nos daba porque no lo pudimos entrenar juntos. En Villaharta, como en Obejo, no pudimos correr por las neutralizaciones pero íbamos contentos por el apoyo de la gente que estaba en la cuneta. Muchísima gente de Pozoblanco animando. Al llegar al final del tramo fue cuando la cosa se empezó a torcer. El coche empezó a fallar, a chirriar, y nos dimos cuenta que el embrague había muerto. Conseguimos llegar a la asistencia de Córdoba como buenamente pudimos, pero allí nos dimos cuenta de que no podíamos hacer nada y nos tuvimos que retirar”, explicaba el piloto pozoalbense, que intenta conseguir patrocinios para “cumplir el sueño” de correr el Rallye Ciudad de Pozoblanco. Asimismo, Martín quiso agradecer el trato recibido por “Olor a Gasolina, David Jeremías y Paco Ortiz, quienes intentaron conseguir un embrague para poder reengancharnos en súper rally” y por “todos y cada uno de los escuderos que preguntaron cómo nos encontrábamos. Gracias a ellos vamos a hacer todo lo posible para poder estar en Pozoblanco”.
Escudería Sierra Morena también estuvo representada en la modalidad de Regularidad gracias a la participación de los equipos formados por Jesús Emilio Latorre-Jesús Latorre y Luis Prieto-Teresa López, quienes realizaron una muy buena actuación a lo largo de las dos jornadas de carrera. Además, la colaboración de nuestros escuderos en las labores organizativas fue crucial para el buen desarrollo de la prueba. Por ello, no queríamos desaprovechar estas líneas para agradecerle su esfuerzo y pasión desinteresada por este deporte.
Foto: Cristian Agredano / Fran Moreno
